Las incoherencias y la falta de representatividad de la democracia.

Luego de 20 horas de sesión, la Cámara de Diputados de la Nación dio media sanción a la ley de Interrupción Voluntaria del Embarazo(IVE). 131 votos a favor; 117 votos en contra y 6 abstenciones.(https://www.parlamentario.com/2020/12/11/como-voto-cada-diputado-el-proyecto-de-legalizacion-del-aborto/). Aún, cuando Misiones se declaró Pro-Vida, dos diputadas misioneras, votaron a favor del aborto: Flavia Morales y Cristina Brítez.   

Ley de aborto, que concluirá en el recinto de la Cámara de Senadores, donde nuevamente veremos, el modo en que nuestros representantes, nos representan. Porque hasta ahora, pareciera que prima las incoherencias, y es pertinente pensar, si realmente existe la representatividad, de la democracia. 
Recordemos que de los 7 legisladores nacionales que tiene la tierra colorada en la Cámara Baja, 4 votaron en contra, 2 a favor y 1 se abstuvo.

En democracia, la representatividad política es la delegación del poder del pueblo en un diputado o senador. Pareciera que, una vez que llegan al poder eso sufre alteraciones, de acuerdo al contexto o, intereses individuales que desoyen la voz popular. 

Hay excepciones, por supuesto, pero ayer quedó plasmado una idea o leyenda urbana, que se le atribuye al genial actor Groucho Marx la frase «Estos son mis principios, pero si no le gustan tengo otros».
En el caso de la diputado Britez, no se podía esperar otra cosa. Pero, la sorpresa fue Flavia Morales porque en 2018, en su primer año de diputada, votó en contra del aborto. Hoy el video ya fue quitado ( https://www.youtube.com/watch?v=uK_QB44MfkU ).
 Sin embargo, ayer cambió su postura y votó a favor del aborto. Sus argumentos, no resisten análisis, como tampoco su trayectoria política al respecto. ( https://www.youtube.com/watch?v=O1_CIHXyca4&feature=emb_logo )

Seguramente, hay otros intereses que llevaron a inclinarse en la ley de aborto. Inexplicable en toda su aserción, ya que en todo momento dijo que ninguna mujer quiere abortar, pero apoya la ley para que lo haga. Que ama la vida, pero vota la ley que mata a un niño en gestación. Entonces, es una total incoherencia ética, moral y de vida personal.

La vieja discusión sigue siendo, si cuando asumen, lo hacen por voluntad de un partido o, siguen representando a la gente que le confió su voto. En campaña, un candidato se muestra atento e interesado en las necesidades de la gente. Sin embargo, al llegar a una banca, modifica su agenda; ya no atiende a sus representados y peor aún, se desconoce si lo que hace es, mandato partidario o, favores personales. Presentes o futuros. 

Mientras tanto, habría que ver qué hacemos con los graves problemas que tenemos como sociedad: Pobreza extrema y sobre todo de la niñez; a los jubilados les quitan derechos en sus haberes; la falta de trabajo;  la atención de salud en hospitales; la educación de calidad....etc.

Nuestra Argentina, ya no puede vivir de planes sociales y políticas públicas denominada gratis, porque nada es gratis. Todo lo terminamos pagando con nuestros impuestos. Un país que vive atrasos económicos,  por la falta de proyección de nuestros dirigentes. Cada presidente que llega, nos promete lo que ya sabemos, pero terminan por no cumplir nada de ello.

Finalmente, hay que decir que en el Senado la lucha seguirá. Porque es el siguiente paso, para que nuestro país siga cuidando la vida humana o, pasemos a ser un estado "modernosos" y constituirnos en uno más de los países abortistas.

Hoy podemos ver que a este gobierno, no le importa ni los niños ni los viejos, porque a ambos les quita derechos. También vemos que es muy fácil cambiar los principios, si es que lo tuvieron realmente.

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