Emprender y no bajar los brazos.*
Pero hoy pudimos conocer (Programa Mesa de Diálogos*) un caso de compañeros de trabajo, que juntos lucharon para salir adelante, con el apoyo de su familia y la comunidad toda, que vio un justo reclamo del empleado, ante sus derechos cercenados. Una patronal que jugó con otros intereses y descuidó su mano de obra. Sin embargo, luego de la crisis de la empresa, los muchachos del frigorífico, pudieron armarse como cooperativa y salir adelante.
La empresa recuperada es aquella que pasa a ser controlada y dirigida por sus trabajadores. Esto, para evitar la pérdida de los empleos ante la amenaza de la desaparición de la firma por malos resultados económicos u otros factores diversos.
Este fenómeno suele denominarse también como “fábrica recuperada”, debido especialmente al origen industrial de este fenómeno.
Algunos ejemplos del nacimiento de las empresas recuperadas pueden situarse en la Italia de principios de siglo XX o en varios países de Sudamérica en los que esta práctica se convirtió en habitual a lo largo del siglo, en parte, gracias a sus problemas políticos y económicos.
Como se ha indicado, es frecuente que se dé el caso de recuperación de empresas en situaciones de riesgo económico como quiebras, abandonos por parte de los dueños o recesiones económicas. De este modo, se produce una autogestión con nuevas estructuras empresariales colectivas, generalmente, más democráticas e igualitarias, como es el caso de cooperativas.
En nuestro país, asociada al neoliberalismo de los 90, la recuperación de empresas tuvo eclosión en 2001/02, pasado esos años hoy tienen formas de autogestión, cuyo fin no es maximiza ganancias sino crear fuentes de empleos y valor para la comunidad.
Otra es la realidad del sector del organismo de cooperativismo y mutual. Donde se manejan con presupuestos, créditos, banco de la mujer y apoyo a emprendedores. Lo que se materializa año tras año, en un evento social importante como es la expo-mujer que este año, tendrá otras características. Pero donde vemos que el emprendurismo moviliza y es otro medio de vida.
Aun en contextos adversos, hay oportunidades de crecer y tener las chances de emprender un nuevo desafío personal o familiar, sin bajar los brazos.
*Lic. Com. Soc. Sergio Javier Benítez
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